¿Qué es un tratamiento ignífugo?
Los retardantes de fuego son compuestos químicos que incrementan significativamente el punto de ignición de los elementos tratados con ellos para alcanzar umbrales de temperatura por encima de lo normal. Estos límites varían en función del retardante pero en todo caso se busca disminuir el peligro de fuego.
Cuando los retardantes son aplicados sobre los materiales, estos son absorbidos y eliminan el espacio para el oxígeno con objeto de detener el fuego y su propagación. Cuando la fuente del fuego continúa en contacto con el material impregnado por el retardante, el objeto se consume de forma mucho más lenta a lo habitual, de forma tal que permite extinguir el incendio.
Generalmente, la aplicación de retardantes al fuego resulta útil en materiales presentes en espacios cerrados con riesgos de combustión, como lugares destinados a recreo, alojamiento, baile, esparcimiento, educación, salud, hogares, oficinas, cines, teatros, embarcaciones, aeronaves, cabañas, transportes, equipos para el combate de incendios.